El parlamento noruego estará votando la próxima semana una ley que establece que los refugiados que lleguen al país serán detenidos y encarcelados por la policía mientras se procesa la solicitud de asilo. El principal argumento de la nueva legislación es que así será más fácil proceder a la repatriación de los refugiados que no son autorizados a quedarse en el país.
La ley establece un plazo de detención máximo de 72 horas tras la cual las autoridades habrán tomado una decisión sobre la permanencia o repatriación de los refugiados.
Al mismo tiempo la policía sueca puso en marcha un equipo especial de la policía fronteriza que tendrá como objetivo proceder a la deportación de inmigrantes sin papeles y que se les haya denegado el permiso de residencia
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