diumenge, 10 de febrer del 2019

México abre sus puertas a los migrantes centroamericanos


Integrantes de la llamada “caravana del hambre”, procedente de Honduras, mientras reciben el 22 de enero, en la fronteriza ciudad de Tapachula, en el estado de Chiapas, sus tarjetas de visitante por razones humanitarias, que les permitirán vivir y trabajar en México por al menos un año, en lo que representa un cambio radical de la política migratoria del país.


Personal de Acnur y de la OIM acompaña en la ciudad de Tapachula, al igual que en otras localidades fronterizas del sur de México, el comienzo de la aplicación del plan migratorio impulsado por el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, que permite a los migrantes centroamericanos quedarse en el país con un visado de un año, renovable. Crédito: Ángeles Mariscal/IPS

En diciembre, al presentar el nuevo Plan Nacional de Migración, vigente hasta 2024, la secretaria (ministra) de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, destacó que México es el primer país en ajustar sus políticas migratorias al nuevo Pacto Mundial para una Migración Segura, Ordenada y Regular, firmado en la sede de las Naciones Unidas en Nueva York el 19 de diciembre, tras ser acordado en una conferencia en Marrakech ocho días antes.

Sin embargo, las señales del gobierno mexicano son ambiguas en puntos controvertidos y para algunos críticos, la nueva política de acogida representa en los hechos la aceptación de convertir a México en un “tercer país seguro”, que contenga la migración hacia Estados Unidos, una exigencia reiterada del presidente de ese país, Donald Trump.


Cap comentari:

Publica un comentari a l'entrada