dilluns, 24 de juny del 2019

Vida, pasión y… pronta muerte del Grupo de Lima


En 1945, al finalizar la segunda guerra mundial, se constituyó un nuevo sistema internacional que daba cuenta aproximada de la correlación política de fuerzas en el planeta, pero que en gran medida respondió a la imposición de Estados Unidos, el gran vencedor en la conflagración, sobre todo porque su territorio no fue tocado por el conflicto y su aparato industrial estaba intacto. También concurrieron a la creación de esta situación la mínima cantidad de bajas que sufrió ese país en comparación con Europa y China y su participación de última hora (menos de un año) en la verdadera guerra que fue la que se desarrolló en Europa, a pesar que ha querido magnificar hasta hoy el carácter de las acciones bélicas contra Japón en el Pacífico y Asia. 




Así, Estados Unidos modeló el mundo a su medida sin poder evitar que la Unión Soviética y China jugaran un papel protagónico, la primera por su gran potencial económico y su participación decisiva en la guerra, y China, que a pesar de haber quedado devastada tras 14 años de ocupación japonesa, hizo valer sus 540 millones de habitantes (más del 20% de la población mundial) para incorporarse a la nueva instancia de poder global: el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas. Estados Unidos añadió a sus dos aliados europeos: Gran Bretaña y Francia. De esa manera quedó configurado el verdadero poder mundial que vino a ser complementado en 1949 con la creación de la Organización del Atlántico Norte (OTAN), brazo militar de Estados Unidos en el mundo, en alianza con países militarmente subordinados 

Pronto, tal estructura tuvo su correlato en América Latina, solo que en su área de influencia directa, Estados Unidos no tuvo cortapisas para diseñar un “traje a su medida”, que se hizo efectivo tras el surgimiento del Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca (TIAR) en 1947 y la Organización de Estados Americanos (OEA) en 1948, lo cual concretó el ancestral sueño panamericano basado en la Doctrina Monroe.

Cap comentari:

Publica un comentari a l'entrada