Las personas de los países del sur de la UE consideran el cambio climático como una amenaza inmediata, en mayor medida que los del norte de la unión. Ese es el principal hallazgo de una encuesta publicada el jueves por el Banco Europeo de Inversión (BEI). La encuesta, basada en las respuestas de 25.000 personas, mide las percepciones frente al calentamiento global y sus consecuencias en el continente europeo, Estados Unidos y China. Según el propio BEI, este es el primer sondeo de estas características que se lleva a cabo.
La población portuguesa es la más preocupada por el cambio climático en la UE (un 93% de las personas encuestadas se declaran “preocupadas” o “alarmadas”), mientras que España, con un 87%, se sitúa como el sexto país más inquieto por este tema, por detrás de Chipre (92%), Grecia (91%), Rumanía (89%) y Malta (88%). Por su parte, los países Bálticos y Holanda son los más escépticos en cuanto a la gravedad del problema.
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