Los relatos en primera persona de siete mujeres colombianas alumbran desde las páginas de Detesto que me digan puta el oscuro mundo de la prostitución de las inmigrantes irregulares en España y el no menos negro de sus vidas en Colombia.
Las historias de Vanesa, Violeta, Luna, Margarita, Lucero, Eva y Marquesa, todos ellos nombres de oficio, son el resultado de los cinco años que Carmen Cortés Torres, socióloga colombiana doctorada ‘cum laude’ por la Universidad española de Salamanca, dedicó a recorrer clubes, bares, apartamentos y otros lugares con el fin de entrevistar a colombianas que se ganaban la vida como prostitutas.
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada