El ministro italiano del Interior, Marco Minniti, presentó al Parlamento una propuesta de emplear en trabajos públicos no remunerados a los inmigrantes que solicitan asilo en Italia.
“Es necesario recurrir a los solicitantes de asilo para obras de utilidad pública, financiadas con fondos europeos”, dijo Minniti y señaló que esta medida no provocará un desequilibrio del mercado laboral porque “no será un trabajo remunerado”.
El ministro explicó que esta medida permitirá “evitar el vacío durante la espera”, y recordó que los trámites de solicitud de asilo pueden durar hasta dos años e instó a reducir el tiempo que demoran.
Indicó que existe un problema con las fronteras externas de la Unión Europea y al mismo tiempo subrayó su apego a la libre circulación de personas dentro de Europa.
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